El Real Murcia se acerca más a Segunda RFEF (0-0). Desaprovecha otro penalti. Nacho Miras destaca con varias paradas. La Balona jugará en Primera RFEF
De nada vale que los rivales fallen cuando eres precisamente el equipo menos fiable. Perdió el Sevilla Atlético, empató el Córdoba y tampoco ganó el Real Murcia (0-0), que no aprovechó sus ocasiones y desperdició otro penalti. Le hubiera facilitado un partido ante una Balona que llegó líder y sale también como equipo de Primera RFEF. El segundo puesto está a 5 puntos y quedan dos partidos. El descenso sigue sin ser matemático, pero hay más agonía que esperanza.
Los de Antonio Calderón venían de cuatro victorias seguidas y entraron con buen pie. Con un juego directo y vertical, la Balona se acercaba al área con un Coulibaly desencadenado. Koroma llegaba como el jugador señalado, pero fue el centrocampista el que se dejó notar más. Además, Adrián Fuentes se lesionó. El Murcia intentó rehacerse de ese comienzo. Desde el pase quiso mover el bloque rival. El hueco lo encontró Abenza y Guille Lozano provocó un penalti por mano. Lo lanzó Carrillo y lo paró Nacho Miras. Otro penalti fallado, como el de Verza en la Línea. En la siguiente jugada, Carrillo buscó la revancha con otros dos disparos.
El fallo espoleó al Murcia. Hasta el penalti, casi media hora, no había disparado, pero después se mostró más vivo. Tenía el balón y quería dominar. Estaba más cerca de eso, con un buen pase en profundidad de Gurdiel hacia Toril. Pero la Balona seguía haciendo su partido. Sin riesgos y poniendo pausa. Y para crear peligro estaba Coulibaly, que apareció otra vez en el área para dejar de tacón un buen balón a Koroma. Le bloquearon el tiro. El Murcia centró mucho y solo encontró una vez a Toril.
Los de Loreto llevaban la iniciativa, pero les faltaba remate. No era un partido sencillo para profundizar y crear ocasiones. Así fue durante parte de la segunda mitad. La Balona se dedicaba a la contención, un grupo muy mentalizado en lo que tenía que hacer. Pero Carrillo aún era incontrolable y con un chut cruzado desde la frontal forzó una gran parada de Miras. El Murcia necesitaba un gol en los últimos minutos. Curto no tuvo su momento. Sí entraron Rognny y Yeray, que pronto soltó dos disparos para otra buena intervención de Miras.
El Murcia empezaba a provocar cosas. Apretaba con Toril en el área o Miguel Muñoz cabeceando con limpieza un córner. Su insistencia casi siempre la frenaba Nacho Miras, también muy seguro en los numerosos centros. El impulso grana no llegó al añadido. La Balona supo jugar los últimos minutos con sustituciones y cualquier otra opción de parar el partido. Pudo ganar con ocasiones de Chironi y Coulibaly. El 0-0 queda explicado con la reacción de los dos equipos: la Balona celebró la Primera RFEF y el Murcia se siente en Segunda RFEF. El segundo puesto exige un acierto que no tiene.
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