El aficionado del Real Murcia espera celebrar un ascenso si está demasiado abajo o una permanencia si ya está lo suficientemente arriba. Y últimamente solo espera celebrar que siguen vivos. Lo que nunca esperaba celebrar era un título. Pero esta “banda de locos” que querían sorprender desde Cádiz están tan locos que hasta han ganado un trofeo. Y ante su público. En casa se quedó la Copa Federación. Cuando tantas veces no supo ser anfitrión, lo fue mejor que nunca en un partido que con 1-1 se estiró hasta los penaltis. Y ahí quien se estiró fue Tanis, que paró dos.
Fue el emocionante desenlace de un partido que comenzó animado. Tenía ritmo e intensidad. El Tudelano, que llevaba más victorias en Copa Federación (4) que en Liga (3) asomó con soltura. Era una final paraponerle un alegre paréntesis a la inquietud liguera. Obieta descargaba, Miguel Díaz encontraba el espacio libre y el equipo se desplegaba. Se asomó una vez y a la segunda no falló. Diego Suárez, que ya venía con tres goles bajo el brazo, remató en el área, desde cerca. El Real Murcia también había comenzado bien. Con agresividad y los primeros detalles levantó aplausos. No perdió burbujas por un inicio tan inapropiado en su final.
Los de Adrián Hernández estaban muy metidos en el partido. Una pérdida de Olivas provocó una llegada peligrosa, Manolo taconeó para la incorporación de Bertomeu, Toril saltaba a presionar tras pérdida y Legaz robaba un balón para luego sacar una falta. Y cada balón parado que bota Andy Escudero es muy difícil de defender. Se sucedían los córners. La determinación del Murcia, tanto como la de Adrián haciendo capitán a Meseguer, le hacía dominador y las llegadas seguían. Andy filtró un balón para Kevin y su centro casi lo remata Toril al primer palo. Sí chutaron Albert, que provocó la estirada de Óscar López, y Manolo, que tras robar él mismo un balón sacó un zurdazo que no entró por poco.
La iniciativa era del Murcia, ante un Tudelano con defensa de cinco que trataba de contener su juego. Solo hubo una mala noticia, la lesión de Legaz que dio entrada a Melgar. A partir de esos minutos el partido se fue emborronando hasta el descanso. El Murcia no llegaba como antes y se enredaba protestando faltas. Las que sufría y se quedaban sin amarilla y las que le pitaban. No se jugaba nada y la crispación subió cuando Lalaguna se quedó tendido. Tampoco pudo acabar la primera parte por lesión.
El Murcia quiso mantener la dinámica en la segunda parte. Óscar López evitó el gol de Álex Melgar, asistido por Meseguer. Suárez, por si acaso, respondía rápido. El riesgo era el peligro que podía tener el Tudelano al contragolpe. Los de Adrián buscaban el empate, pero sin la claridad de los mejores minutos. En el pensamiento se empezaba a colar la imagen de otra desilusión más, y a menos de 72 horas de recibir a un FC Cartagena que haría más daño. La doble decepción, la primera alimentando la segunda. Pero entonces Meseguer centró desde la derecha y Toril cabeceó como un gigante.
Al calor del empate entró Josema y el Murcia siguió buscando el ataque. Juanra remató fuera tras un córner y Manolo rozó el gol tras un taconazo de Melgar que tampoco dejaba de intentarlo. No fue suficiente para evitar una prórroga que trajo a Armando como cambio extra. Con él, Adrián pasó del 4-4-2 al 3-4-1-2. El Tudelano también metió a Socorro por Miguel Díaz. No pasaban cosas hasta que el Murcia entró el trance. Toril y Melgar, siempre listos para agitar, remataron. Josema con todo a favor, tardó de rematar en otra ocasión clarísima. Mientras, Azkue dio el gran susto. Tanis evitó ágilmente el gol con un paradón.
La segunda parte de la prórroga fue otra cosa a partir de un Melgar que apenas podía andar aunque pasara por boxes para que le vendaran el tobillo. El Murcia estaba en la práctica con 10 y se notaba. Sufría. Aguantaba como podía. En ese momento no era capaz de más. Entonces, en el 119’, llegó el segundo más largo. En un centro lateral, dos jugadores del Murcia se estorbaron y la pelota iba camino de ser gol en propia puerta. Ese balón era Montilivi. Ese balón era todas las cosas que pueden salir y sí, salen mal. Pero casi sobre la línea se pateó al demonio. Si esa pelota no había entrado es que el final solo podía ser feliz para el Real Murcia. Los penaltis nunca hubieran sido tan crueles como un gol en propia puerta en el 119’ en una final en tu propio estadio. Efectivamente, todo lo que vino después acabó en fiesta. Tanis paró dos penaltis y el Murcia no falló ninguno, de Armando a Juanra. El Murcia, esa banda de locos, era campeón.
FICHA TÉCNICA
REAL MURCIA (4-4-2): Tanis; Bertomeu, Edu Luna, Juanra, Kevin; Albert, Manolo, Meseguer, Andy Escudero; Legaz y Toril.
ASÍ ACABÓ (3-4-1-2): Tanis; ARMANDO, Edu Luna, Juanra; PEQUE, Manolo, Meseguer, Kevin; JOSEMA; ÁLEX MELGAR y Toril.
Entrenador: Adrián Hernández
TUDELANO (5-3-2): Óscar López; Diego, Zamorano, Lalaguna, Olivas, Delgado; Ángel López, Lázaro, Suárez; Miguel Díaz y Obieta.
ASÍ ACABÓ (4-4-2): Óscar López; Delgado, Zamorano, Olivas, ZABALETA; Ángel López, AZKUE, Lázaro, SOTO; SOCORRO y Obieta.
Entrenador: José Mari Lumbreras
Goles: 0-1 (6') Suárez. 1-1 (61') Toril.
Penaltis:
0-1 Azkua
1-1 Armando
1-1 Obieta. Para Tanis
2-1 Edu Luna
2-1 Olivas. Para Tanis
3-1 Manolo
3-2
4-2 Juanra
Incidencias: Enrique Roca de Murcia. Final a partido único de la Copa Federación (5 de diciembre de 2019).
SALA DE PRENSA
Adrián Hernández
José Mari Lumbreras
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