domingo, 18 de octubre de 2015

Remontando hasta el liderato

El Real Murcia ganó, suma seis partidos invicto y pasa del descenso al liderato. Los de Aira remontaron con dos goles de Azkorra. El Linense sigue sin ganar a domicilio

Fue hace mes y medio. La temporada apenas había comenzado, pero el Murcia encadenaba tres derrotas y un empate. Tras caer en Lorca, Aira admitió que posiblemente era su peor momento en el Real Murcia. Entonces, el equipo encontró el hilo ante el Betis B y no lo ha soltado. Remontó ante el Linense un partido que se complicó él solo y la escalada en la tabla ha llegado hasta la cima: líder del Grupo IV, empatado con el UCAM Murcia pero con mejor diferencia de goles (+5 y +4).

Tras el prestigioso triunfo en el Carranza, la continuidad fue la respuesta. Ruso y Guilló siguieron en el once y Aira repitió alineación. Arturo se quedó fuera de la convocatoria. Sin duda, el 4-4-2 ha encajado al equipo a la vez que ha desubicado a los mediapuntas. Chavero sabe bien el esfuerzo, con días más lúcidos o más frustrantes, que debe hacer para no perder su puesto. El Murcia recibía así al Linense, o la Balona para los amigos. Estaba por ver qué rival llegaría a Nueva Condomina, si el que no era capaz de ganar a domicilio o el que encadenaba dos victorias vitamínicas en casa, primero ante la Hoya y luego ante el Ebro (y el emparejamiento posterior frente al Athletic). Estadísticas contra ánimo. La mezcla resultó insípida.

Es cierto que la puesta en escena del Linense fue positiva, buscando al Murcia y con acciones en campo rival. Duró poco. Desde el comienzo, se vio un Murcia concentrado y activo. No hubo rastro de la frialdad ante el Linares. Con ese interés, el equipo buscó las bandas a la vez que Chavero no dejaba de ofrecerse. También Germán exhibió su portentosa conducción que divide a los rivales. Cuando aún habían más intenciones que hechos, llegó un susto. Mejor, un preludio. Ruso, demasiado blando, permitió que Espinar se quedara solo, pero Fernando tapó muy bien. 

Ahí el Murcia se desató y el Linense se vio desbordado. Sergio García hizo un regate genial y luego asistió con precisión para Carlos Álvarez, que remató fuera. Otro centro, otro disparo de Carlos, un tiro al palo de Germán... El Linense pedía tregua y el Murcia le dio mucho más. José Ruiz se dejó robar la pelota y Satrústegui fue a la ayuda con apuros y sin control. Penalti y 0-1 de Canario.

La jugada dejó aturdida a la defensa. Aunque ya había mostrado cierta inseguridad antes, el 0-1 multiplicó el nerviosismo. El caso es que no era producto de un rival amenazante.  La inestabilidad se la generó el propio equipo. Una sorprendente debilidad ante el buen momento de la temporada y  la prueba superada de Cádiz. Nadie se libró. Pumar encadenó dudas e imprecisiones, Ruso no fue firme y Satrústegui se mostró torpe. El resultado era una defensa blanda. 

Los errores individuales atrás desorientaron al Murcia. Dejó de generar ocasiones como antes y ya no lograba desajustar a su rival. De hecho, el foco de atención (o el del incendio) era la defensa, que pudo conceder algún otro gol. La zaga solo era sostenida por un Fernando clave de nuevo. Se lanzó con agilidad para desviar un tiro cruzado de Zamorano. La primera mitad acabó por servir también para valorar a Guilló, que aunque por momentos se fue perdiendo exhibió una autoridad en el juego que le debe dar muchos minutos.

Aunque la segunda parte comenzó sin cambios, el primero no tardó en llegar. No sorprendió la salida de Sergio, en general poco productivo, ni la entrada de Isi, con la exuberancia suficiente como para recuperar el pulso. El Murcia trataba de tocar con paciencia, pero no lograba crear ocasiones ante un Linense que se dedicaba a esperar, a permanecer junto y a cerrar espacios. Azkorra marcaba diferencias bajando balones, jugándolos y, en definitiva, dando continuidad al juego. Cuando ya se preparaba otro cambio, el delantero empezó a cobrar tras tanto trabajar. Un centro al área lo dejó Chavero de cabeza y Azkorra no perdonó. Todavía no estaba del todo estabale el Murcia y su zaga regaló varias cesiones a Fernando comprometidas. Chavero soltó un gran tiro ajustado que Mateo se estiró bien abajo.

No tardó mucho en llegar la jugada decisiva. El azar, a veces, es justo. Pumar disparó desde lejos tras un córner y tras un rebote el balón llegó a pies de Azkorra. Inapelable de nuevo. Y es que Lorca queda lejos hasta para el mismo Gorka. Los mano a mano ya no son un mal sueño. Con el gol el Murcia se vino arriba. Fue un gran final de partido, reanimado y motivado. Y mientras el Linense era incapaz de replicar y buscar el empate, la victoria pudo ampliarse más. En una tarde en donde la defensa tembló, en el área la contundencia la puso Azkorra.


FICHA TÉCNICA 
Real Murcia (4-4-2): Fernando; José Ruiz, Ruso, Satrústegui, Pumar; Germán (Fran Moreno), Guilló, Chavero, Sergio García (Isi); Carlos Álvarez (Javi López) y Azkorra. 
Balompédica Linense (4-2-3-1): Mateo; Palancar, Olmo, Chen, Gallardo; Salva Rivas (Copi), Guerra; Canario (Forner), Mauri, Zamorano; Espinar (Rubio). 
Goles: 0-1 (20') Canario, de penalti. 1-1 (64') Azkorra. 2-1 (83') Azkorra. 
Estadio: Nueva Condomina, 4062 espectadores. Novena jornada del Grupo IV de Segunda B.

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