El Real Murcia transitó por caminos familiares. Preservó su área pero no conquistó la contraria. Tuvo el balón sin convalidarlo por algún gol. Así solo pudo llevarse a la boca un 0-0 ante el Jumilla. La reincidencia merece el atenuante de los fichajes. Hasta 6, todos los disponibles, fueron titulares. Con la conjunción de todos ellos solo se puede mejorar. Se debe. Así que este empate merece verse más como un punto de arranque que de frenada. Calidad hay. Es lo que se presupone y se advierte. La competencia, como la inocencia: hasta que se demuestre lo contrario.
Fue un primer tiempo dividido, bicolor. Comenzó bien el Murcia, con iniciativa. Trataba de asentar su posesión, aunque algunas combinaciones morían por imprecisión. Enfrente, el Jumilla no arriesgaba y se quitaba el balón de encima aunque eso implicara regalarlo. Los de Paco jugaron con una banda derecha flotante. Y es que Rubén Ramos se metía por dentro, cerca de un Rayco que era segundo punta. Toda el costado derecho quedaba para Juanjo, que dio la profundidad pretendida. Proponía el Murcia y otros nuevos gustaban. Curto venía a recibir y daba continuidad al juego y Josema demostró porte y toque. Su jerarquía no pasó desapercibida. Diego Benito, titular tras dos suplencias, filtró un buen pase para Rubén Ramos, que cayó y pidió penalti. Luego, Elady probó el chut, pero salió muy alto.
Fue en el 23’ cuando el partido giró. Fue cuando llegó el primer córner para el Jumilla. Luego llegó otro, y una falta lateral. Y otro córner. Y otro más. Tantas interrupciones e infracciones favorecieron al Jumilla. Llevaron el partido al terreno que le interesaba. Aire y munición. En casos así, con equipos expertos a balón parado, la mejor defensa es la prevención. El Murcia no supo contenerse y le quedó la cura: todo el equipo metido en el área. Ni un solo jugador se quedaba descolgado, ni siquiera en la frontal. El Murcia tuvo un paréntesis donde parecía retomar su inicio. Tras una buena subida de Pumar se pidió penalti por mano y poco después Rayco recibió un fenomenal balón tras el que no pudo superar a Jero, ágil estirándose abajo. Pero esa recta final de primera parte iba a seguir siendo vinícola. Titi asomó con su capa y todo tembló. Le ganó un balón a Golobart, siguió la aventura y actuó de señuelo. Con tres defensas encima, picó para un Perona que se quedaba solo ante Diego Rivas. Controló con la mano y ahí se fue la ocasión. Antes y después de esta jugada, Titi también inquietó desde la izquierda. Un centro lo tuvo que sacar Pumar y otro acabó en córner.
El mérito del Murcia fue su capacidad de corregirse. Ahora sí, apenas concedió córners y tampoco cometió faltas. En una de esas pocas concesiones, Neftalí cabeceó un saque de esquina a las manos de Diego Rivas. Sí, era mejor la prevención. Además de quitarse preocupaciones atrás, eso ayudó a los granas a asentarse con la pelota arriba. Pumar pareció avanzar mucho más por la izquierda y Elady demostró que tiene un regate fácil. El ataque posicional del Murcia dejaba dudas, aunque un pase afilado de Ramos a Pumar, con remate franco pero defectuoso de Rayco, dio luz. Siempre quedaba el balón parado y David Sánchez tuvo un libre directo estupendo, perpendicular a la portería. Su disparo golpeó en la barrera y la pelota dio en la parte externa del palo.
El partido se calentó cuando Manolo quedó tendido y el Murcia no echó el balón fuera. En la jugada siguiente, Julio de Dios entró con fuerza. El fuego no se extendió. Ya estaba bien cerrado el Jumilla, defendiéndose con todo y con un Neftalí inmeso. Incluso replegaba con un 5-3-1 cuando Chirri bajaba a defender. Intentaba conectar Curto con Germán. Faltaban espacios y sobraban rivales. Cuando el Murcia lograba disparar se topaba con cuerpos y piernas ajenas. No lograba descerrajar al Jumilla y entonces llegó la última bala. En el 92’. Otra vez una falta en el añadido. Sacó David Sánchez y cabeceó Germán, libre de marca por mucho que segundos antes Pichi Lucas y Perona, desde el banquillo, alertaran a sus jugadores. Algo no veían claro. Pero ese testarazo, ganador y, por qué no, reivindicativo, encontró la respuesta de Jero. El portero rival no siempre puede ser un aliado. El Murcia se fue rumiando el empate, que con otras igualadas de la jornada no es tan malo sin ser bueno.
FICHA TÉCNICA
Real Murcia (4-2-3-1): Diego Rivas; Juanjo, Golobart, Josema, Pumar (C); David Sánchez, Diego Benito; Rubén Ramos (Alarcón), Rayco (Germán), Elady (Isi); Curto.
Entrenador: Paco García.
FC Jumilla (4-2-3-1): Jero; Albiol, Neftalí, Verdú, Juanje; Julio de Dios, Manolo (Paul Quaye); Chirri, Perona (C) (Borja), Bello (Terol); Titi.
Entrenador: Pichi Lucas.
Incidencias: Nueva Condomina, 5.592 espectadores. Jornada 23 del Grupo IV de Segunda B (29 de enero de 2017). Se guardó un minuto de silencio en memoria del abonado murcianista Jesús Herrero López.
SALA DE PRENSA
Paco García
Pichi Lucas
ZONA MIXTA
Diego Benito
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